martes, septiembre 29, 2015

San Miguel de Allende y los recuerdos, ¿por que me aferro?

La primera vez que fui a San Miguel fue en el 2013, fuimos super rapido a dejar una papeleria que L. iba a dejar para un concurso, nos quedamos en un hotel precioso, y bastante accesible, un mes después regresamos, esta vez para la boda de un amigo de él.

Ese año fue particularmente difícil para mi, así que estos pequeños placeres fueron un salvavidas en ese momento, fue tanto que para mi: San Miguel representa un lugar hermoso, con recuerdos increíblemente bellos.

Hacia tiempo que quería regresar, y hace poco regresamos, pero nada era ya como en los recuerdos, ni como en las fotos, no por que el lugar hubiese cambiado, si no por que yo cambie.

Muchas veces me pesco haciendo esto, queriendo regresar a un lugar por que la pase muy bien en otro momento de mi vida, y al regresar, pareciera que nada tiene sentido, pero esta vez fue diferente, me di cuenta que estaba pasando y saque provecho de eso.

Reflexiono y no entiendo por que tiendo a hacer eso, regresar pensado que todo sera como la primera vez o no regresar por el temor que sea como la primera vez...

Lo cierto es que las fotos que saque me gustaron mucho, fue muy cansado, pero creo que valió la pena; de hoy en adelante procurare no volver a un lugar solo por ese sentimiento, volver sin esperar nada, solo a la expectativa de conocer nuevas cosas.

No me malinterpreten, la pase muy bien, pudo ser mejor?, si, pero dependía de mi. Al final todo depende de mi..

1 comentario:

Anónimo dijo...

La magia de un lugar es única, irrepetible y ubicada en una parte del tiempo. Ya después o pierde dicha magia o adquiere más, pero jamás parece como algo uniforme.

Saludos...

jcc

Miran los ojos con extraño recelo, varados, finados, cada uno al cielo
Ghysell