Anoche que llegaste casi no te sentí, mi estado mental paso de ser lucido a la alucinación en menos de 5 minutos, y todo, por que recordé aquella noche que no dormí estando a tu lado, los risos de tu cabello me hipnotizan al borde del delirio, no quiero que nadie mas los toque, imaginarlos me produce un fuerte golpe de felicidad que dura lo que el rayo al caer al suelo y volverse trueno, y cuando te veo me paralizo sin poder hacer nada, no puedo acércame, ni quiero que tu lo hagas.
La horas se vuelven espinas en mi corazón, te vas y creo que eres un fantasma inmerso en mis pensamientos, en esos que me obsesionaron anoche. Cierro los ojos y solo puedo ver tus enormes ojos, te vas y solo puedo recordar tus rizos enredados en mis dedos. Los odio!!