viernes, enero 22, 2010

Hace tiempo rompí mis códigos, por las noches me atormentan las letras que marque con sangre, se meten en mis entrañas en imágenes nítida, en silenciosos lloriqueos, y es entonces cuando nuevas imágenes se pintan con colores desconocidos, el amanecer pinta el ocaso de los mismos colores que ayer, pero hoy ya estamos perturbados por las piedras en el lago de la calma.

There's no turning back

1 comentario:

Anónimo dijo...

Piedras que se hacen còmplices mudas. La calma ahì esta, el lago tambièn, no hay manera de detener el tiempo de la vida, pero recuerda que sì lo manipulamos a nuestro antojo. Un abrazo.

Miran los ojos con extraño recelo, varados, finados, cada uno al cielo
Ghysell