viernes, febrero 02, 2007

Sin rumbo

Tiempo después una silueta entro por mis ojos, eras tu de nuevo, con ese sabor a hierro frió que te deja la sangre seca y vieja en la boca, la saliva la volvía dulce y tibia de nuevo. Tu definición se volvió diferente.

ihre liebe dijo...

al tenue calor de las olvidadas estrellas te veía, tambaleabas a cada paso como si por tus venas corriera una suave droga, pequeña la luna sonreía a estos dos nuevos amantes, el horizonte pálido me ofreció de nuevo tus labios, la distancia se desvaneció y se fundió en un largo abraso etéreo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

al tenue calor de las olvidadas estrellas te veia, tambaleabas a cada paso como si por tus venas corriera una sauve droga, pequeña la luna sonreia a estos dos nuevos amantes, el horizonte palido me ofrecio de nuevo tus labios, la distancia se desvanecio y se fundio en un largo abraso etereo.

Miran los ojos con extraño recelo, varados, finados, cada uno al cielo
Ghysell